Nuestra sociedad en la que nos toca vivir,
nos va ofreciendo todo y si nos dejamos llevar ante estas ofertas, pasamos a
ser simples espectadores. Es decir, sujetos manipulados, pasivos. Y quizás nos
sentimos orgullosos de vivir en esta era de la comunicación digital, pero no
advertimos que el mundo nos lo están convirtiendo en un gran mercado.
Un mercado de noticias
pero también de consumo. Es decir, que todo queda globalizado, perdiéndose lo
personal.
Caminamos hacia un pensamiento
colectivo. Se pierden o mejor, se superan los límites de lo personal; ya todo,
o casi todo, es un campo de simuladores virtual. ¿Estamos perdiendo o haciendo
disminuir la creatividad de la persona?
Es
verdad que en breve tiempo conseguimos mucha información, pero la cultura se
queda en el mundo de la superficialidad. Las nuevas tecnologías nos permiten
relacionarnos con quien deseamos pero debemos respetar siempre la alteridad.
El
ser humano es relacional y esto nos lleva a un enriquecimiento mutuo. Seamos
actores inteligentes y no simples espectadores. La vida es una actividad de
relación. No saber que hacer es síntoma de haber perdido el dinamismo, la
creatividad…
No hay comentarios:
Publicar un comentario