SER OPTIMISTAS

SER OPTIMISTAS

Nos es fácil ser optimistas si nos quedamos con la realidad que observamos a nuestro alrededor. Si permanecemos aquí abajo va a ser difícil descubrir horizontes. Tendremos que escalar, subir para descubrir horizontes nuevos.

        

Cuando se escala una montaña, desde la cumbre se ve mucho mejor todo el amplio horizonte. Los problemas y la realidad de cada día, se ven diferentemente.

        

Hay que relativizar los problemas, los contratiempos; todo lo que nos impide ver nuevos horizontes. Mantengamos el valor de vivir cada momento con optimismo. Nunca permanecer indiferentes o pasivos.  El entusiasmo tiene que superar el pesimismo y la mediocridad.

         Lo que distingue a una persona pesimista de otra optimista es la forma de ver e interpretar los acontecimientos y las vivencias de cada día. Busquemos el encuentro y la empatía con mentalidad optimista y abierta. El optimismo tiene una función comunicativa y de encuentro.

      Leyendo me encontré con esta frase: “El mundo es de los optimistas. Los pesimistas son meros espectadores”. F. Guizot. Sin duda, el optimismo nos da más ánimos para seguir y tener más ganas de vivir.

         Es importante vivir como personas optimistas, sí, pero realistas. Así es la realidad de hoy, no tiene cara de ser muy optimista. Pero pasemos la página y descubramos lo positivo. Seamos personas, creativas y optimistas. Siempre hay motivos para sonreír y compartir.